MÁS ALLÁ DE LAS FRONTERAS…

Cada año la grilla de cuatro elementos se nutre de espectáculos provenientes de otras ciudades. Más en el verano, pero también durante los meses restantes. Son obras que forman parte del circuito de teatro independiente  y que con gran esfuerzo vienen a nuestra ciudad a jugar un partido difícil: traccionar público sin el conocimiento del que gozan los elencos locales ni la maquinaria publicitaria del circuito oficial o comercial.

En las últimas temporadas cambió la modalidad de programación. Cada obra concentra sus presentaciones en un periodo corto de tiempo, aliviando de ese modo los costos de producción en gira. En 2024, recibimos por segunda vez a LA BODA DE LA HIJA DEL PRESIDENTE y a LA PATRIA  AL HOMBRO, impulsadas por la energía de Alejandra García, productora corajuda que no se amedrenta por las difíciles circunstancias que nos toca atravesar.  

También algunos realizan presentaciones únicas, como GALAVENTURAS (destinada a las infancias y proveniente de La Plata) o UN ASUNTO DE VIDA O MUERTE y ROBERTA (que llegaron desde CABA).

Con el ímpetu que le otorga jugar un poco de local, Julieta Carrera (actriz marplatense radica da en la Ciudad de Buenos Aires)  compartió NO ME MUERO, su unipersonal recientemente estrenado y que consiguió el apoyo del público que agotó las localidades disponibles.

En sentido inverso Melina Petriella, de larga trayectoria en el campo teatral porteño y recientemente instalada en nuestra región, asumió el riesgo de una temporada completa de COMO SI LA VIDA FUESE UN MOMENTO PACÍFICO Y ESTABLE, trabajo que le valió reconocimientos de todo tipo desde su estreno en 2019.

Una mención aparte la merece el actor mendocino José Kemelmager que trajo esta vez su unipersonal SALVAVIDA y que, con empeño y dedicación, recurriendo a las viejas estrategias del volanteo y del contacto cara a cara con sus potenciales espectadores, es ya un participante activo de las temporadas estivales en nuestra ciudad.

Imposible saber qué motiva a tantas y tantos artistas a asumir semejante desafío. Ojalá sientan el acompañamiento de una comunidad que muchas veces es esquiva a asumir el riesgo que significa apostar a ese otro teatro. El que seguirá germinando en cada rincón del país y que han hecho del movimiento teatral independiente argentino un fenómeno valorado y reconocido mucho más allá de nuestras fronteras…